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El acné en la mujer adulta no es solo una condición de la piel, sino que provoca cambios relevantes en la autoestima. Las causas pueden ser diferentes para cada mujer. Conoce cuáles son algunas de estas.

El acné de la mujer adulta es una condición dermatológica que ha ido en aumento en los últimos años. A su vez, afecta a mujeres de diversas edades y puede tener varias causas subyacentes.
De hecho, las lesiones de esta patología suelen ser frustrantes a esta edad. Incluso, pueden tener un impacto significativo en la calidad de vida. En este artículo, exploraremos las posibles causas del acné en mujeres de más de 30 años y detallaremos los enfoques de tratamientos disponibles para abordar esta condición.
¿Cuáles son las causas del acné en las mujeres de más de 30 años?
Lo primero que debes saber es que las causas para cada mujer pueden ser diferentes y es fundamental comprenderlas para proporcionar una atención médica efectiva. Algunas de las causas más comunes son las siguientes.
1. Cambios hormonales
A lo largo de la vida de la mujer, las hormonas pueden experimentar fluctuaciones significativas debido a diferentes etapas y eventos. Estas fluctuaciones hormonales, en ocasiones, pueden aumentar la susceptibilidad de las mujeres a desarrollar acné en la edad adulta. La American Academy of Dermatology Association destaca los siguientes eventos hormonales como desencadenantes:
En concreto, lo que ocurre en el cuerpo de las mujeres es que estos desequilibrios hormonales pueden aumentar la producción de sebo en la piel y obstruir los poros, lo que conduce a la formación de lesiones de acné.
2. Factores genéticos
¿Sabías que existe una predisposición genética al acné en algunas mujeres? Es así. En consecuencia, esta predisposición hace que sean más propensas a desarrollar esta condición, incluso en la edad adulta.
Un estudio publicado en la revista BMC Medical Genomics, sugiere que la familia de genes que influyen en la función de las glándulas sebáceas, en específico CYP17A1 y FST, está involucrada en la presentación del acné y el riesgo de desarrollar acné severo.
3. Estrés y estilo de vida
El estrés crónico puede afectar los niveles hormonales y desencadenar brotes de acné. Además, otros factores que contribuyen al desarrollo de la patología en la mujer adulta incluyen los siguientes:
Según los datos obtenidos gracias al estudio realizado por la revista Clinical and Aesthetic Dermatology, los pacientes adultos con acné suelen fumar más que los jóvenes. Por lo cual, se establece la relación entre el tabaco y ser más propenso a desarrollar acné en la adultez.
4. Productos cosméticos y cuidado de la piel
El uso de productos cosméticos comedogénicos, es decir, que obstruyen los poros, o incluso usar productos de baja calidad, así como una rutina inadecuada de cuidado de la piel, pueden causar y empeorar el acné en mujeres adultas.
4. Productos cosméticos y cuidado de la piel
El uso de productos cosméticos comedogénicos, es decir, que obstruyen los poros, o incluso usar productos de baja calidad, así como una rutina inadecuada de cuidado de la piel, pueden causar y empeorar el acné en mujeres adultas.
Al respecto, un artículo publicado por la revista Indian Journal of Dermatology, Venereology and Leprology, aconseja utilizar productos de limpieza sin jabón para las pieles con acné, ya que tienen un pH muy similar al de la piel (5.5).
Opciones terapéuticas para el acné en mujeres mayores de 30 años
Ten en cuenta que cada caso de acné es único, por lo que es importante encontrar el enfoque que funcione mejor para cada mujer en particular. Asimismo, cuando las opciones terapéuticas no muestran resultados favorables de forma rápida, lo ideal es consultar con un médico dermatólogo.
La American Academy of Dermatology Association aconseja mantener una rutina regular de cuidado de la piel para controlar el acné. Para ello, recomienda lavar la piel de manera suave dos veces al día con un limpiador gentil y productos no comedogénicos.
A su vez, los exfoliantes suaves y los tónicos a base de ácido salicílico o glicólico pueden ayudar a eliminar las células muertas de la piel y liberar los poros. Otros tratamientos terapéuticos que podrías tener en cuenta son los siguientes.